viernes, 10 de diciembre de 2010

Quién la tiene más
















País,
caza de brujas
de izquierda a derecha.

Se me guarde
de pertenecer al bando
de cazadores
o cazados.

Voy por camino
de tierra,
sola,
siguiendo a las estrellas.

sábado, 27 de noviembre de 2010

Vigioniria VII

Perfecta. No
no es.
Imperfecta
es la luna
y bella.
Tanto como
mis óvulos azules
bochas
dominadas,
azarosas
jugando
a la ronda lunar.
Cicla con el sol
por eso
hay amarillo
de luz.
Calor dorado
de incubación.
Anido,
empollo
ideas y carne,
sangre y pelos.
A voluntad.
Ilusión Real Ilusión.

Vigioniria VI

Versos
cercanos a la muerte.
Y no la pienso.
Sumisa
como una farola
que tarda
en encenderse,
me cubro
los brazos regordetes.
Son de una mujer
- me digo -
una mujer no maravilla.

VigioniriaV

Enhebro rubíes
como lo hiciera
un poeta antiguo,
muerto.
No me averguenzo
por lo romántica
ni siquiera
por nada.
Absorta
observo a Morfeo.
Se hace dueño
de mi cuerpo.
No puedo escribir
con estos párpados
que de tanto cerrarse,
duermo.

Vigioniria IV

No hay como la noche
para recibir
musas.
Quieta, mansa,
tal vez estrellada
y sin embargo
tumultuosa,
secreta,
mágica,
diosa.

Vigioniria III

Pinto y
entonces puedo escribir.
Pues la mano,
libre de palabras,
danza
con los colores
de la madrugada.

Vigioniria II

Secas las pinturas,
duros los pinceles,
cansada yo
y es el escritorio revuelto.
Cierro los párpados,
bostezo
y me dejo caer
con los truenos
que me llevan en andas
hasta la cama
y veo,
como último reflejo,
el destello
de la mañana.

Vigioniria I

Dejo que tu rosa
se seque.
Hasta el extremo.
Sus pétalos yacen
en racimos
endurecidos,
pétreos.
Tu rosa,
es ahora
aún más rosa.
Ella, sola,
ha querido
conservarse
inmutable,
perecida.
Fiel.

La hora

Triste. Triste. Triste,
pues la verdad
no puede ser negada.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Uterania o Uteranía



Libre de libertad
y de taxi.
Hay espacio
para alguien.
Nada. Vacío.
Libre de libertad
y de taxi.
Coágulo que
vive, nace y muere.
leche    /  niño/    esperma

No sabía si eran úteros llenos
o lunas uterinas.
Tiempo.
Un tiempo otro.
Bolas Lunas
de cristal.
Otras lógicas.
Roja la vulva, hinchada.
Estrellado útero.
Deseo ver
en amarillo,
de luz.
Ojos y oídos
y narices
hay en el estallido
de jugos.

Universo lácteo personal.
Olas hembra.
Diosa Madre
de útero, clítoris
y vagina.
Se me revela
su imagen
coronada de estrellas.
Hay lunas oscuras,
azules.

Tridimensión
del creo.
Y ensayo
y ¿error?
En el pequeño
universo lácteo
hay una Vía Madre,
están:

la duda
el olvido
lo eterno

Espero pasiva,
recibo.
Creo,
engendro
en el río y rio.
Celebro,
asumo, acepto
limpio y crezco.

De cómo este poema se concibió primero en imágenes...

martes, 2 de noviembre de 2010

Bienaventuradas



Bendito sea mi clítoris

y el de todas las mujeres.

Me abandono al placer

sin control.



Ni siquiera me aferro

a la vida.



Autorizarse el gozo,

gemir con todo

el cuerpo.



Lanzarse al vacio

con brazos

y piernas abiertos.



Retorcerse de alegría,

dejarse en los gestos,

vaciarse de egos,

y en cada aliento

fundirse, diluida

en agua, en aire.



Transmutarse

entre el fuego de los

cuerpos.



Crear y

Ser al mismo no-tiempo

receptiva.



Llegar al éxtasis

agotada de amor,

queriendo abrazar

a Morfeo,

con las mejillas

rosadas,

embriagada,

ahora ya, devuelta

a los sentidos.



Suspendida otra vez

esta vez sí,

sobre la cama.

 

sábado, 30 de octubre de 2010

A MI MADRENIÑA, poema de Germana





Me acunan tus palabras de la infancia,


me lamen las heridas, me atesoran,

me hacen Niñamadre en piel de loba dulce,

arrullos que me llevan de la mano,

hacia la Abuela vasca,
hacia la Anciana Sabia

que late irreverente en  todos los jazmines

(sabia-savia de todos los colores,

de todos los perfumes,

de todos los dolores).



Manu madre chiquita de sol en los jardines,

cunita de arroz y palabras,

mecedora tibia,

ronda de caricias que traman los cabellos,

silencio para el cuento que nunca se acaba,

mano en la frente, pases mágicos,

dulce torre de mimos,

muralla de luna y mareas,

ma, mami, madre, mía...




Puedo gestarme mujer en nuestro espejo de nieves:

princesa azul, buscadoras de dragones,

hechicera fragante,

mujer de hierba y fogata,

de risa y zozobra.



Enredadas de estrellas

ovillo interminable

de ríos y de rosas.

Lazos de sangre y seda

acuarelas de diosas.

Madre e Hija

nos parimos,

una y una:

nosotras.



A mi madreniña, donde quiera que me encuentre

A mi abuela Germa, que está en el mar



Germana Martin



(en la foto: arriba Germanita, abajo la abuela Germa

y Manuelita, mi mamá)


¡Gracias a mi hermana Ivana Gisela Álvarez,
por llevarme de la mano y el corazón en las palabras!







.

viernes, 29 de octubre de 2010

Brújula

A mi me gusta caminar

por el medio de la calle,

una de esas laterales

de tierra.

nomás.


De ahí veo si me voy

p´ la izquierda

o la derecha

pues ese, es el nombre

que le han puesto

pero yo

sigo la esencia

solita,

nada más que

del almita.


Nada más que

del almita.




Amo-a-mi-mamá

A Irma



Mi madre habita los espacios

los habita todo.

Comprende

sin teorías

y se infla como un globo

cuando no me dejan ser.



Me cuida

de sus miedos y de los míos.

Sabe de lo que soy capaz

aún cuando todos los demás

han bajado ya, los brazos.

- no comprenden

el camino lateral

que voy tomando -.



Mamá me quiere feliz

y nada más.

Se deshizo tantas veces

de sus egos

para acompañarme

en la travesía de vivir.

Se calló y gritó

todo lo que pudo.



Mamita lo es todo:

su regazo,

y su perfume a flores

y frutas.

Es mi maestra

de mamá:

Ha tejido a lo largo de los años,

una capa larga de hilos invisibles,

sin herramientas,

más que las de su propio amor.



Madre:

Hoy con este poema

soy yo la que quiero

acunarte,

la que quiere mecerte

para que puedas llorar como

hija.

Me lo ha dicho mi abuela

en sueños:

que te hace falta.



La primera vez

que hube de cuidarte,

tuve miedo.

No sabía

que los hijos podían

velar de ese modo por sus padres.

Es que era y soy

tremendamente hija.



Mamá:

puedo acunarte

y llevarte flores de mi jardín.

Regalarte ahora yo,

amparos,

cuando no te dejan ser.

Inflarme.

Puedo darte mis manos

de miel

para que descansen

tus huesos

agobiados.

Sólo espero que lo pidas

porque a veces,

olvido que puedo cuidar-te.



Me deleita que

te gusten las cerezas

y las tortas sabrosas

y las frutas

de todos los colores,

y que comas

las cáscaras

como un conejito.

Pues no me entusiasman

las mujeres maravilla.



Me ilusiona

ver cómo haces arte

con los maquillajes

y cómo defiendes

tus uñas de loba.

Aprendo que se puede

conservar el estilo.



Mujer de paciencia

generosa.

En extremo, dedicada

a sus amores.

Hoy vengo a darte

descanso

en los brazos

de nuestras ancestras.

Recuéstate

sobre los de la abuela Josefa

y los de mamá Ñata.

Ellas me cantaron

tu nombre

y me dijeron

cuánto te aman.



Descansa

sobre mis brazos

que juntas, entonaremos

una canción de cuna

para ahuyentar

los males:

dolores de panza

y monstruos concretos.

Mujer, hoy

puedes

dejar de ser toda mamá

Y ser HIJA.



Soplemos todas

juntas sobre tu útero,

presente,

aliento salvaje.

Reguemos

con bocanadas de

fuego

y agua.

Que se incendie

tu alma de hembra

y sucumbas

a la mujer-sabia

a la que ya, has tomado

de las manos.



Hoy, te acunamos

todas

para que llores

y limpies.

Para que respires

profundo

y sueltes carcajadas.

Te visitarán las diosas

y reiremos y cantaremos

¡Todas!



Octubre 2010

miércoles, 6 de octubre de 2010

dis-tintas



y las rosas
y los cielos

siempre inevitables
provocando la dicha
el insolente deshielo
de los corazones
y las primaveras
pero vos y yo
descendiendo contracorriente
a ras del aire
a tientas
sin velos ni ademanes
deslizando el roce del abismo
mariposas atrapadas
hasta el fondo del ser
donde te leo y me miro
y aún así no despierto
sólo este equinoccio a contramano
que no desamordaza el grito
ni siquiera un húmedo bostezo
este vuelo solitario y desmedido
ombligo de mi misma
a contra vida
perseguida de soles
y de fuegos


                                        a Ivana Alvarez,

                                        por su poema 21 de septiembre



Ailén Kuyén

domingo, 26 de septiembre de 2010

21 de Septiembre



Sigo hibernando cuando todo afuera se revela primavera. Los pimpollos que revientan y distingo mujeres rebosantes. O son ellas las que estallan. Pieles asomándose, tímidas. Y otros cuerpos ansiosos por el aire, desnu-darse, que los toque el sol y hombres, mujeres.

Reparo en estampas floridas y lunares. Amarillos rabiosos. Pero de mí, no se saben hojas verdes. He quedado triste en el otoño, que allí fui bella. Fuera de ciclo, me parezco a una flor marchita. A esa ramita disecada por un libro. Sin recupero del brillo de los ojos y a distancia de encontrar la salida convincente. En la desidia, con un ostracismo aburridor. Tal vez más lúcida que nunca. Y con esa misma, me atonto. Por enésima vez la incertidumbre. Será que no llegué hasta el bulbo. Digo, el fondo verdadero. No en el que estuve con olor a líquidos de cloacas. No el de placeres de morder asfalto. El fondo del ser. Saber quien soy yo.

martes, 21 de septiembre de 2010

mi




adentro
nido corazón océano

esta infinita oportunidad

de entibiar mi afelpada cadencia

                                         de misteriosas voces
oportunísimo tiempo de poemas,
inoportuna prisa
in-solente primavera,
que me arrastra a renaceres profundos,
allí donde crece el ocioso retoño:
la maravilla


Ailén Kuyen (Gercita)
en agradecimiento a Ivana Gisela Álvarez Ricardo
por su poema In-productiva


viernes, 17 de septiembre de 2010

IN-Productiva

Indisciplinada


docta,

hace tiempo

que conmigo

nada es ya.

Ante el juego

de la productividad

mi columna

grita.



Arrugar el papel-rápido-Estirar la pintura-Ajustarse al reloj



Petrificada

no salgo de casa

temo

que el afuera

me de una oportunidad.



No sé-puedo-adaptar-me-más

Si no quieren verme

tal cual soy

no estaré entre ellos.

Que la ausencia sea mi discurso

triste

y tal vez cobarde.

Creación de agua salada













Gotas de agua,

me descansan.

Andan mi cuerpo,

lo modelan.



Van atesorando

los pedazos

de inocencia caída.

Lágrimas que a su paso:

protegen, crean.



Despierto y comprendo

mi naturaleza humana.

Pues pienso y sueño

tan profundo,

que a veces,

estoy lejos.



Entonces,

me pongo de pie.

martes, 14 de septiembre de 2010

Cinco segundos antes

Si me quedase una palabra

diría: belleza.

Lo pienso

ahora,

que se me han escurrido,

huidizas

agobiadas

de ser chivo expiatorio.



Podría ser autocensura

o que estoy viva
que no puedo explicar

nada.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

"El cuerpo es

presencia

obcecada



Estirpe inicialmente frágil

luego inclinada hacia su tumba



El alma se silencia

en sorbos



Alma y cuerpo

conversan

por suspiros



Lengua común



Que ambos

comprenden



Que ambos

desconocen



A su infinita manera".





(de "habrá luna").

martes, 7 de septiembre de 2010

Va-y-vén

Que te pinto, pinto
y me quedé sin palabras:
Muda de escritura.
Que si uso los ojos
se me van las manos.
Que si actúo
no bailo.
Que si toco el tambor
para enraizarme
me re-vuelo /más/ que nunca.
No aprendo he,
que soy una.

Circular

Me encontré



demasiado circular


es decir,


en el idéntico círculo.


Saldré por el espiral


para nutrirme


de menos


figuritas repetidas.


En exceso espejada


en los mismos retratos.


Exagerados rojo


y marrón.

lunes, 23 de agosto de 2010

Savia


No tengo miedo de mi sangre.   
He olfateado, por fin,
su aroma.


Ahora, que veo por dentro,
advierto la magia.


Ahora que comprendo:
La bendigo y la entrego.


Danza de
paños preciosos,
floridos,
de algodón.
Coágulo-hijo.
Agua roja.
Suelo bendecido.


Somos: agua,
Tierra y yo.
Todas una
en comunión
de sa(bv)ias.


Doy lo que tengo,
lo que soy:
Energía roja creadora
de hijos y de flores,
de raíces y gusanos.


Con pala en mano
he dado de comer
a la tierra,
y ahora también
bebe.
Me, bebe.


Sangre-linfa
que fluye hacia afuera.
Que muere
de lo que no fue,
y se remoza
en la luna nueva.


Espero
una - otra oportunidad
de proveer vida
fuera de mi útero,
dentro del ser.


Un día no la daré
por ahí.
Será para mi hijo
de sangre y piel
de huesos y pelo.


Luego,
más luego,
será guardada
en mi cuenco.
Lactándome
de fluido
creativo.


Ser una vieja lumbrera.


Y después,
volver toda a la tierra:
Sangre, lágrimas
Y alma.

lunes, 26 de julio de 2010

¿YO - CASTA?

Y el Mito de Edipo...




El rey de Tebas, Layo, hijo de Lábdaco, acudió al oráculo de Delfos a consultar a la pitonisa sobre su destino. Contestó la divinidad con un consejo: Evita tener hijos. Si tienes alguno, matará a su padre y se casará con su madre.

Pero Layo y Yocasta engendraron un niño, al que luego decidieron dar muerte, temerosos de la maldición del oráculo. Y ordenaron a un sirviente de palacio que abandonara al niño en el bosque del Citerón, a fin de que allí lo devoraran las fieras del monte. El servidor lo dejó allí, con un pie taladrado por una fíbula de bronce. Un pastor encontró al niño abandonado y fue a entregarlo a los reyes de Corinto, que, como no tenían descendencia, lo acogieron corno a un hijo propio. El pequeño recibió el nombre de “Edipo” -que significa “pie hinchado” por la marca que dejó en él aquella herida- y creció en el palacio de Corinto como un príncipe de noble estirpe.

Y, ya adolescente, fue a consultar al oráculo del famoso santuario de Delfos sobre su destino. Y el oráculo respondió:


Matarás a tu padre y te casarás con tu madre


domingo, 25 de julio de 2010

Res (ao) nar






Crecer hacia abajo,                                                                                                                           


ser raíces gruesas.

Penetrar.

Como sea adentro

                 será mi copa.



No puedo recordar

quién soy

         ni a qué he venido.

Sé que los pájaros

vienen a contarme

pero yo, yo,

              no les entiendo.



Voy enamorándome

de ellos, pero

-  a veces –

      me temen.

Encantada

quedo con sus cantos.

                       Y su vuelo.



Les envidio que puedan

hospedarse en la cumbre

                          de aquel árbol.

Quisiera hacerme, entonces,

                            una, con los pájaros.

Pero pronto

y de repente

comprendo que soy

                         árbol.

No he de moverme,

               sólo observarlos.

Ofrecerles mi rama

                     de escondite.



Y así,

desbordada de pájaros,

recibo las caricias

               del viento.

Aire que mueve

a las plantas y los

                     duendes.



Y dejo que el sol

                      se marche por la tarde.

Acaso muera

y sea

   ave.

viernes, 23 de julio de 2010

Altosano

Mujer con Pájaro - Colección Mujeres by Raquel Figueiras.



Quiero dormirme                                                    


en este altillo de primavera

aunque afuera sea invierno.

Soltar las palabras

y que vuelvan a mi

cuando sea preciso.



Ser una con los pájaros,

rozar con

mis alas las hojas amarillas

y los frutos secos,

helados.



Deambular la noche entera

entre sueños,

y que me develen,

secretos.



Teniendo las pupilas

como las tengo,

hacia adentro.

Cada vez viendo

menos, de lejos.

miércoles, 14 de julio de 2010

Lucera

No conozco el nombre


de los pájaros

- que acuden a mi ventana –.

Y sin embargo,

ellos

dicen el mío.



Hablan un idioma

que apenas

comienzo a comprender.

Sospecho regalos

en esos árboles,

entreveo plumas en pecho

y colores

por confesar.



Apenas abrir los ojos

me trae a la conciencia

el graznido

de lo que me parecen

patos gigantes.



Todo para compartir

habitando el alma.

Sino, no me sirve

de nada.



Moro en la luz

e imagino más habitaciones

en donde

quepamos todos.



Luz que se proyecta

luz que se propaga.

Faro encendido

que multiplica.



Oigo a las ovejas

y a las cabras.

Nos dan la bienvenida:

                                  ¡Vengan todos!

                                           ¡Vengan!

jueves, 17 de junio de 2010

AL POEMA... por Germana Martin

Feroz tu poesía que lame mis heridas de hoy.

Palabras de agua dulce de un río rojo que nos une.

Tus garras que son alas,

tus colmillos que son perlas,

tu pelaje que aterciopela la noche.

Me sana tu poema.

Me da bríos de fiera liberada.

Y escapo con él, entre sus letras.

Me uno a tu deliciosa carrera por el bosque,

y de tu boca y de la mía, nace la misma canción:

un aullido,

un doloroso dejar partir,

una baba volcánica,

una bocanada de violetas...

Corremos hermanita,

el bosque huele fresco,

un pétalo nos guía hacia esa ronda de amigas,

mujeres de luna y sol,

mujeres de tierra agua pluma y fuego...

¡Ya estamos aquí!

¡Con ellas!

Entonces la Poesía nos abre la garganta

y juntas erizamos un grito milenario

para parirnos libres y de pie,

desnudas de temores,

diosas de corolas encendidas,

lobas de la misma manada,

mujeres untadas con flores, cielos, mieles,

hechiceras,

bien heridas.



Germana Martin

A tu poema, Ivana.

domingo, 16 de mayo de 2010

Feroz


Anido una inocencia solitaria

pues, ya no seré la misma:

me han crecido los pelos

y cultivo garras.



Colmada de cicatrices,

me supuran las llagas.

Llevo heridas de guerra,

ya no será tan fácil

que sea tu prisionera.



Tengo una visión de alas arrancadas,

como cartílagos,

y hubo plumas.

Las veo ahí, mullidas, tiernas,

aún prendidas en un cuerpo tembloroso

que intenta.



Llevo conmigo cólera,

y un cansancio rancio.

Me pesa.

Llaman, avisan,

ancestros con útero sagrado.



Hay furia condensada

y con clariaudiencia escucho

en susurro, con oídos ávidos,

a una mujer primitiva,

la de todos los tiempos:



No olvides que soy una fiera,


que se domestica así misma.



Y entonces, aúllo feroz,

paso mi lengua en las heridas,

me alzo en cuatro patas,

preparo una mirada soberana,

muevo mi cola de hembra

y teniendo a la luna por testigo

salgo al bosque de una vez.

Salgo ahora,

salgo ya.

jueves, 13 de mayo de 2010

"La vida es más compleja de lo que parece" Jorge Drexler

http://www.youtube.com/watch?v=mUTduolNstk


El velo semitransparente

del desasosiego

un día se vino a instalar

entre el mundo y mis ojos.

Yo estaba empeñado en no ver

lo que vi, pero a veces

la vida es más compleja

de lo que parece.



Pensaste que me iba a quebrar

y subiste tu apuesta,

me hiciste sentir el sabor

de mi propia cocina.

Volví a creer que se tiene

lo que se merece,

la vida es más compleja

de lo que parece.



Todas las versiones

encuentran sitio en mi mesa,

Todas mis canciones

por una sola certeza.



No quiero que lleves de mi

nada que no te marque.

El tiempo dirá si al final

nos valió lo dolido.

Perderme, por lo que yo ví

te rejuvenece,

la vida es más compleja

de lo que parece.



Mejor, o peor, cada cual

seguirá su camino...

Cuánto te quise, quizás,

seguirás sin saberlo.

Lo que dolería por siempre,

ya se desvanece,

la vida es más compleja

de lo que parece,

la vida es más compleja

de lo que parece,

la vida es más compleja

de lo que parece.

domingo, 9 de mayo de 2010

Domingo

Los Domingos con sol me gustan menos que los domingos en que llueve. Lluvia que cae sobre la tierra y limpia como limpian las lágrimas. Me gusta el domingo de cielo gris blanco, de llovizna que deja a los chicos de mi barrio seguir jugando a la pelota.

Siempre me han parecido tristes los domingos, sobre todo los de sol radiante. Para que un domingo sea efectivo en la resolución del ocaso de las penas tiene que acompañar lo que duele y colaborar en la depresión en que uno/a esta sumido/a.

Deprimirse acompañado por el día. ¿Quién puede deprimirse profundamente si el día no lo acompaña?

jueves, 6 de mayo de 2010

Deseos

No puedo ser nada que no sea el ahora mismo.


Padezco de una ansiedad inaudita,

que más que moverme, me paraliza.

Quisiera seguirle el ritmo al viejo Felipe,

que baila la tarantela.



Los sesos, esos sí, tienen trabajo

y también el alma, que sueña.

Pero mis manos

se mueven nerviosas,

aplauden o desaprueban

no plantan pezuñas

para el propio jardín.



Hay más deseos que haceres.

¿Y qué soy?
Absurda estoy,


este otoño

con la belleza de lo irracional. Desatinada.



Ya no cambio más. Habrán de cambiar los otros.

O se irán.



Y nada más.

Soy de Temer

Hace poco explotó mi inocencia resistente.

Me reventó en la cara.

Y por esa grieta herida se me escapa una maldad

que no tenía.

Estancada como el agua de una fuente de plaza

mal querida.

Soy triste, toda triste y vacía.

Y hoy, hoy, mi alma no me asila.

Silenciosa, incompasiva,

hoy, hoy, soy de temer:

Implacable y despiadada.

Ya no seré la misma:

Me he vuelto inclemente, fría

rigurosa, hasta violenta

con tal, con tal

de que no me pases por arriba.

Así

Lo único que quiero es sembrar.


Que renazca todo ese amor nuevo

y que venga hacia a mi

en borbotones.

Así me quedo hasta que

Y qué si estoy triste y sin sentido.

Y qué si deambulo como zombi.

Por esta casa, una,

que ya no es mía y no me importa que sea de nadie más.

Y qué si cuando barro tiro toda la basura en la rejilla de este décimo piso.

Que se tapen todas las cañerías y que reviente el edificio por el aire.

Así estoy, así me quedo.

Hasta que se me pase toda la bronca, todo el hartazgo.

La desilusión, el dolor y la ansiedad.

Hasta que se pudra la incertidumbre,

y salga a la luz el destino.

martes, 20 de abril de 2010

Canto de Nueve Lunas


A mi Trinidad querida


Estaba ella cantando


como si de todo fuera inmune

y se le coló una semilla

que la vino a despertar:

de mujer a mujer-mamá.



Estaba en la granja del nunca jamás

y de un plumazo

hechó raíz en la tierra

desde el medio de las piernas;

Si ahora, por arriba tambalea,

hubo días en que no se dejó así nomás.



Trinó se asustó juró y perjuró

Se dijo cosas absurdas

con la voz del juicio peor.

Ahora pide fuerza, valor

para tomar con entereza

lo que ella misma

creó.



Vendrá tu espejo mayor

espejo de dos.

Amarás como a nadie

esta vez,

más que cualquier amor.

Y no habrá nada más importante

Mi trinor.



Vendrá la niña con el pan

y habrás de cantar entonces

allí, donde debías cantar.

No has de preocuparte

pues tus alas batirás

aunque con ellas no sólo vueles:

a alguien protegerás.

Se trata de ti, por fin.

Se trata de ti.

Allí, en un punto concentrado

hallaré toda tu luz.

Y sabré cuál es tu tarea

Y me dirás, sin querer y sabia

cuál es la mía.



Otra vez, me enseñas el camino.



Ya te sabía madre

en esos tiempos del nunca jamás.

Son tan evidentes

todas las canciones de cuna que llevas contigo.

Y las caderas del dar.

Unas manos hermanas del tambor.

Y las delicias de las ollas.

Toda tú se muestra madre.

Amorosa como la tierra

que es mamá.



Bailaré contigo todas las lunas

y me lo enseñarás todo.

Y cada vez con más equipaje.

No te preocupes,

habrá vuelos siempre.

jueves, 1 de abril de 2010

No Creo

Vasija que no germina


el viento

no le trae semillas.

Fertilizadas las tierras

de por aquí y allá

pero de esta maceta,

en mi puerta

no nace planta

alguna.



No hay creación

y no hay éxtasis.

miércoles, 31 de marzo de 2010

A Luz

Cientos de moléculas


de mi cuerpo

en plena transformación,

que va de A a Z.

Van quedando ahora

como granos del lado del revés

exactas opuestas.

Cada una llenándose de amor,

las veo: faros pequeños de luz.

Se ejecuta

una maravillosa mutación

completa.

Igual a la oruga

previa alada

ando aturdida.

Suspendida en una rama

del árbol del mundo

permanezco en estado de quietud

después de gran ebullición,

de casi arrastrarme

desgastada.

Voy llegando con los últimos

suspiros.

Y todo fue amor.

Y todo será.

lunes, 29 de marzo de 2010

ALITHEA

ALITHEA




Voy en viaje y arrojé lo esencial

a mi valija:

Un abanico de silencios.

Llevo despertares

Y una visión de la pureza.



No hay ya tantas palabras demás,

ingenios intelectuales

ni burdas teorías.

No hay límites exactos

y tampoco viven demasiado

los efímeros

deseos.



Llevo parpadeos

en los que percibo

mi propia

humanidad.



Me alzo por encima

de añejos calendarios

pliegues de piel

y muros

sensibles.



Abro los ojos

y veo.

Veo.



Se que fueron

segundos, pero

¡Cuánto estuve ahí!



Entonces,

ese inmenso instante

de silencio

es como la bocanada

de aire

que puede tomarse

después de no salir

de debajo del agua

por un tiempo exagerado.



Cada vez,

encuentro fortaleza

en aquella quietud.



Ruego que comas

de la misma

semilla.

Y vuelvas al punto

donde lo tuyo

es tuyo.

Y te recuperas

para que nadie

pueda arrastrarte.



Que tomes al silencio

como una rotunda

actividad.

Sanarás mirándote

al espejo.

Sin críticas, sin culpas

y sin castigos.



Caminas para adentro

hasta encontrar

la matriz sin tiempo;

Allí haces la labor

de una tejedora:

Tomas los puntos

que estaban sueltos

y ejecutas nuevos,

ubicas tu alma

en un renovado

molde.

Las agujas serán

las horas

y los hilos energía

pura.



Se produce un

efecto inmediato:

Comienzas a escuchar,

pero esta vez

con los oídos abiertos.

Tus orejas

limpias, ordinarias

desnudas

transparentes y genuinas.



Hay una sutileza:

Si canto me acerco

pero si hago silencio estoy.

Si hablo me recreo

pero sino, sino

puedo recordar.



Retornar a la semilla:

No olvidar.

Alithea

sábado, 27 de febrero de 2010

La NUTRICIA (o La Gran Teta)

M’ hijo


que bebe

de la gran teta.


Destapamos

un conducto

que se abre

al amor.



Por allí

fluye, finalmente

lo que soy: baile,

poesía, canto,

música,

colores.



Por la ubre

tomo lo que soy

y nutro la vida.



Yo misma

bebo y doy.



Aunque

no comprendan

mi alegría

he salido

de la noche

más oscura.



Habrá otras.

Habrá de donde beber.

viernes, 26 de febrero de 2010

NANA


Igual que a una cebolla

develo mis velos

Así me voy sanando

de afuera pa’ dentro.

Las vértebras
se me alinean

Despido esa joroba.

Me voy

enderezando

y comienzo

a ser yo misma.



Se me destaparon

los conductos

y todo es

abundancia.

Ya no pido permiso

para usar los

colores.



Se liberaron mis dones.

Hacía tiempo

andaba buscando mi voz

y ahora

ando cantando

como si no

fuera yo.



Al principio,

fueron las manos.

Las abrí

para sanar desde la tierra:

para escribir

para pintar.



Después me vino

lava por la garganta.



Es todo este cuerpo

dormido

que despierta

encantado.

Entumecidos

los huesos,

así: las ideas.


Estoy siendo

Arco Iris

como puente

que invita a

los amigos

a venir del otro

lado.



Y es verdad: El otro día

anduve llorando

por haberme

dejado estar

tanto.

Pero ahí nomás

me curaron

con curitas

y palo santo.



Así,

me voy sanando

de adentro pa’ fuera.



Sana, sana,

Sanó.

lunes, 22 de febrero de 2010

Hay una música que viene de afuera


Llueve.
Llovemos todos.
Lorra. Arrasa.
Ensucia. Limpia.
Lloramos todos.

Agua.
La misma en su doble versión:
La que purifica
y sin embargo,
nos puede dejar
desvastados.

Pobres los pobres
y también los ricos.
El agua elige.
El cielo.

Nos arrulla
en el suave golpe en las piedras.
Nos ahoga
el olfato y los oídos
la boca
y los pies.

Tal vez nos mate
Quizás nos ayude
a vivir.

El agua danza hoy
con furia,
con todas las gotas
que puede.
Invade, sitia,
prohíbe, detiene.
Lleva consigo.
Alegra al
espíritu nostálgico
que puede mirar
por la ventana
y entristece
al amante del sol
y a los que no
deja volver.

Truena.
Seca un relámpago.
Los temerosos
cierran las ventanas.
El agua corre y
se lleva zapatos.
Muchos zapatos.
Y memoria.
La lluvia es presente.
A veces, no deja
pasado.

Agua.
Agua que pudre y
agua que refresca.

Llueve
y parece que no
va a parar.

Llueve
y no para
más.

Paró.
Siempre para.

domingo, 14 de febrero de 2010

Loba - Luna

Quiero a la Luna por blanca


que se cubre con el manto de la noche.

La Luna me recuerda,

me trae lo viejo,

lo antiguo.

La Luna no es santa

y me refleja.

La Luna es esencia

es luz

es alma

es vieja

y esta noche es nueva.

Se ve espléndida

como una reina.

Nostálgica

como una madre,

romántica como una niña

sabia

como la tierra.

Hoy la luna me hace de puerta.

Aúlla.
Canto


para obtener mi cuerpo

no para que idolatren

sus piezas.

Canto

por un cuerpo de mujer

que pueda

bailar

amamantar

y hacer el amor.

Canto

para crear este cuerpo

a voluntad.

martes, 26 de enero de 2010

Canción gitana de entre casa




Ay  .    .    .   no hay dolor


que no me duela, que no me duela

No hay dolor

que no nos duela, que no nos duela.



Mi bien, mi bien

dejame beber la luna

que me la beba, yo toda entera

p que se calmen penitas penas

penitas penas.



Ay   .   .   .     como yo viviera

como yo viviera

la vida entera

como una niña, como una niña

flaca y risueña.



Ay, no hay dolor

que no me duela, que no me duela

No hay dolor

que no nos duela, que no nos duela.



Recitado


Vería yo,


todas las tarde (s)


por la ventana


si supiera


que mi amo (r)


me mirara.






Que nací sola


y al mirarme en el agua


pues me veo igual:


Sola y amargá





Ay, no hay dolor

que no me duela, que no me duela

No hay dolor

que no nos duela, que no nos duela.

sábado, 23 de enero de 2010

O




Me quedan mis pies.

La panza está boba.
Me mastico los cachetes
y los brazos
se me arrugan.

Me duelen las rodillas
los dientes se me aflojan
los párpados hinchados
y las pestañas caídas.

Sólo me quedan
estos pies ampollados
picados
anchos
que se apoyan de costado.

Me quedan los pies
y ¡ha! Esa línea
que se hace entre las piernas
cuando junto las rodillas
y se me ve el triángulo
en el espejo.

Me queda
la niña chiquita,
la adulta no sé donde está.

No me quedan
los pelos
caídos en el inodoro.
Están las arañas
y los pozos,
y ya no está
la sonrisa bondadosa.

Sin cuello,
me quedan las axilas
con perfume
de Enero
en Buenos Aires.

Estos pechos
ya dejarán de ser míos
y se irán por la vida,
que hace lo que hay que hacer.

Desperdigo pedazos
de piel y de
sangre.
A dónde voy
con esa piel
con esa sangre.

Dónde estoy.
Acá con mi mano izquierda,
tembloroza.
Con el pulso
del corazón en el dedo,
con la boquita
arrugada
de concentración.

O me fui
con el pis de esta mañana,
con el residuo
que me saqué de los
dientes.

Cuándo me fui
y dónde estoy.

O soy el sueño
que soñé esta madrugada.
O escapé con el
suspiro que exhalé
de tristeza.

Dónde estoy

Me fui con las
uñas que me corté
o con los
mocos que dejé
en el pañuelo.

Dónde estoy

No sé si mi alma
esté en mi
cuerpo.

No sé si ésta
que veo en el espejo
soy yo.

Quizá haya otro
cuerpo para mi
o no haya ninguno.

Dónde estoy

                 Aquí,
                       donde me fui.

viernes, 22 de enero de 2010

HONRO




Madre: bebo de tu ser,

te acepto y lo que es tuyo

lo dejo en ti.

Estás en mi corazón.

Padre: bebo de tu ser,

te acepto y lo que es tuyo

lo dejo en ti.

Estás en mi corazón.

Los bebo, los tomo.

Arrodillada, con reverencia,

los honro.

Y me hago cargo

de lo que es mío.



Padre: te amo incondicional

te reconozco.

Madre: te amo incondicional

te reconozco.

Padre madre: soy suya

y soy del viento.



Hija de antepasados,

entrelazada.

Atrás de unos cuantos,

delante de otros tantos.

Al lado,

a la derecha y a la izquierda.

A los miembros

de mi linaje,

aún los marginados:

A todos, con reverencia,

los honro.



Pero también:

hija de mi misma

y del viento.

Y del viento.

martes, 19 de enero de 2010

Rota


Me nacen flores
por la boca y las orejas.
La sangre me sabe a savia
y
tirada,
en la tierra, sobre los requiebros,
boca arriba,
soy una con las
matas de hierba.
Mi ego se diluye
y chorreo ser,

como un triángulo
entre las estrellas.

martes, 12 de enero de 2010

San Pedro

Fue once de enero y se me destaparon los oídos.
Se hicieron plenos los conductos.
Y nací otra vez.
Plena de plenitud nueva y plena de plenitud vieja.
Con el fluir del viento,
descansaron, en esta mesa, el grupo
de auto convocados.
Tacos adorables, palabras de corazón abierto.
Ensoñación de natalicio.
Es nena dijo la partera.

Se está haciendo mujer. Por florecer. Por cobijar.
Tener todo para dar.
Ser mujer pronto.
Antes o después de cumplir los treinta.
En la antesala
suspiro
Canciones de cuna.

Julieta espera con panza,
con experiencia, Susana.
Laura espera con esperanza.
Yo, espero con canciones
y con cartas.