Como un gran útero la tierra se desgarra. Me concede indivisas flores abiertas del infinito - que yo comprendo en mi jardín florecido: puesto que nuestro amor se descubrió por ejemplo, una manzana una frutilla,o un plátano, maduros - . El planeta, este mendrugo de tierra aquí, frente a mi puerta, se partió.
domingo, 16 de mayo de 2010
Feroz
Anido una inocencia solitaria
pues, ya no seré la misma:
me han crecido los pelos
y cultivo garras.
Colmada de cicatrices,
me supuran las llagas.
Llevo heridas de guerra,
ya no será tan fácil
que sea tu prisionera.
Tengo una visión de alas arrancadas,
como cartílagos,
y hubo plumas.
Las veo ahí, mullidas, tiernas,
aún prendidas en un cuerpo tembloroso
que intenta.
Llevo conmigo cólera,
y un cansancio rancio.
Me pesa.
Llaman, avisan,
ancestros con útero sagrado.
Hay furia condensada
y con clariaudiencia escucho
en susurro, con oídos ávidos,
a una mujer primitiva,
la de todos los tiempos:
No olvides que soy una fiera,
que se domestica así misma.
Y entonces, aúllo feroz,
paso mi lengua en las heridas,
me alzo en cuatro patas,
preparo una mirada soberana,
muevo mi cola de hembra
y teniendo a la luna por testigo
salgo al bosque de una vez.
Salgo ahora,
salgo ya.
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2 comentarios:
Feroz tu poesía que lame mis heridas de hoy.
Palabras de agua dulce de un río rojo que nos une.
Tus garras que son alas, tus colmillos que son perlas, tu pelaje que aterciopela la noche...
Me sana tu poema...
Me da bríos de fiera liberada...
Y escapo con él, entre sus letras.
Me uno a tu deliciosa carrera por el bosque, y de tu boca y de la mía, nace la misma canción:
un aullido, un doloroso dejar partir, una baba volcánica, una bocanada de violetas...
Corremos hermanita, el bosque huele fresco, un pétalo nos guía hacia esa ronda de amigas, mujeres de luna y sol, mujeres de tierra agua pluma y fuego...
Ya estamos aquí!
Con ellas!
Entonces tu poesía nos abre la garganta y juntas erizamos el grito milenario para parirnos libres y de pie, desnudas de temores, diosas de perlas escondidas, lobas de la misma manada, mujeres untadas con cielo, flores, mieles...
te abrazo tantooooooooooo!
Ger
Luciría incompleta esta pequeña obra venida del alma de todo si no estuvieran tus palabras. Con ellas se completa, se nutre y me. Todos los abrazos.
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